Es sábado,
pero podría ser un camino que se pierde en el bosque o en el pantano,
un lavadero lleno de colores,
una rebanada de tarta de perfume de manzana,
una canción de hace veinte años,
un capricho,
Una voltereta.
Llegamos a Gualda a primera hora de la mañana con el perfume de la lavanda metido en la furgoneta.Nos marchamos a última hora de la tarde con el perfume de ajedrea metido en la furgoneta y todas estas sensaciones dentro del corazón:
Tras leer el libro de firmas escribo este texto con la emoción a flor de piel por todos los tesoros que encontré escritos de puño y letra de los visitantes de la exposición de arte rural "Dulce Agua".
También me dedicaron dibujitos hechos por niños y mayores....un estanque con patos, peces , ranas y nenúfares , un helado de pétalos de rosa, una flor, un corazón con el nombre de Gualda escrito dentro ., otro corazón , otro corazón y una sonrisa grande....
Como no puedo transcribir todo lo escrito voy a dejar palabras sueltas de cada persona que creo que van a daros una idea de lo que en el lavadero de Gualda se vivió ayer :
-Suavidad interior
-añadiendo belleza a nuestro mundo
-sentir vivos los pueblos
-una exposición acorde con el lugar
-Un baño de arte para nuestro pueblo
-el lavadero está muy pero que muy bonito
-Tras la exposición quedará el sonido del agua que está ahí y siempre ha estado.
-Agua sustancia de pureza y limpieza
-Sabiduría y sensibilidad desprenden tus obras
-Mujer leyendo frente al rio , mujer que sueña dejando mecer la pluma en el agua
-Me ha proporcionado alegría y dulzura
-Piedras de cristal flotando
-Rayo de sol en este mundo gris.
-Gracias por venir a nuestro pueblo.
Gracias por vuestras palabras escritas o habladas por vuestra presencia, por vuestro lavadero , por vuestras historias y recuerdos vividos en el lugar, por vuestra amabilidad y tantos y tantos cuidados que nos hicieron estar tan a gusto en vuestro pueblo.
Nos hicisteis sentir unos más de la familia de Gualdeños. Así nos sentimos tratados, como se trata a los amigos y a la familia.
Me encantó ver niñ@s , gente mayor y de todas las edades, no solo de Gualda, también de otros lugares.¡Ah ! y la VISITA ACOMPAÑADA por el pueblo todo un éxito por la mañana , tanto ,que por la tarde se tuvo que improvisar otra visita con otro grupo.
Los pueblos pequeños tienen mucha vida y mucha luz solo hay que saber verla , apreciarla y agradecerla tal y como me escribió un niño de 11 años , gualdeño, no sé su nombre pero me llamó la atención especialmente porque vino solo y estuvo mirando todo con mucho interés y luego se sentó " en la silla salva vidas" y escribió estas palabras sobre la exposición :
Cuando un niño de 11 años escribe esto tras visitar "Dulce Agua" ya está todo dicho.No se puede pedir más.
¡¡¡GRACIAS GUALDA !!